La mente descontrolada, el "parásito", es ni más ni menos lo que se define como "el Ego" en los diferentes caminos espirituales.
En el Yoga suele definírsela como "Yo Falso", y en contraposición se habla del"Yo Verdadero" que es el Alma, esa parte nuestra que está hecha a imagen y semejanza de lo divino.
Sin dominar al Ego es imposible hacer pie en nuestro verdadero YO.
Todas las técnicas de meditación intentan aquietar la mente, "desinflar" el Ego para que finalmente se abra nuestra alma.
Por eso el maestro Gurdjieff decía que no cualquiera tiene alma, hay que ganársela...